Esta receta francesa tiene historia, la hago todas las navidades y cada año voy perfeccionando detalles, así que podéis disfrutar de la cuarta versión mejorada sin tener que equivocaros tantas veces como yo. (los que probaron las tres versiones anteriores están de acuerdo en que esta quedó estupenda!)
INGREDIENTES:
1 pollo de 1,5kg aproximadamente cortado en octavos.
100gr de beicon entreverado.
8 cebollas francesas pequeñas.
de 4 a 6 champiñones naturales de tamaño mediano.
2 dientes de ajo.
4 cucharadas soperas de salsa de tomate.
1 cucharada de cognac.
150ml de vino tinto.
150ml de caldo de pollo y verduras.
2 cucharadas de mantequilla ( unos 60gr)
1 cucharada de mantequilla aparte ( unos 30gr)
2 cucharadas de aceite de oliva suave.
Sal, pimienta.
Laurel, perejil y tomillo al gusto.
1 cucharada de azúcar.
Maizena.
PREPARACIÓN:
Se espolvorea sobre los trozos de pollo previamente sal pimentados, dos cucharadas de maizena a través de un colador, primero por un lado y luego por el otro.
En una cocotte se echan las 2 cucharadas de mantequilla y el aceite de oliva se dora el beicon cortado en taquitos se aparta y en esa grasa se doran las cebollas que se reservan a su vez, por último se doran los trozos de pollo. Se retornan todos los ingredientes a la cocotte.
Se flambea prendiendo fuego a la cucharada de cognac sobre la cocotte.
Se añaden los dos dientes de ajo machacados, las especias y se cubre el pollo con el vino tinto y el caldo.
Se lleva a ebullición lentamente y luego se le baja el fuego a suave durante 1 hora.
Se limpian los champiñones con una servilleta húmeda por ejemplo pero sin meterlos en el agua, si son frescos se puede usar el champiñón completo, incluyendo el tallo, si ya tienen algunos días los tallos se secan y quedan más leñosos, así que es mejor no utilizarlos.
Se cortan en tacos y se doran en una sartén con la otra cucharada de mantequilla, apenas 30 gramos.
Se añaden a la cocotte cuando faltan 20 minutos para terminar la cocción.
Para que la salsa quede bien reducida es necesario terminarla aparte, así que pasamos el pollo y el resto de los ingredientes a otro caldero donde ya se servirá el plato y se reduce la salsa con una última cucharada de mantequilla( Si nuestro nivel de colesterol lo permite) lo que hará que esta quede brillante, a veces es necesario espesar la salsa con otro poquito de maizena.
Queda estupendo si se prepara el día anterior y luego se calienta dulcemente…por supuesto acompañado de una papas fritas, así que en Navidad la puedes preparar el día 23, y en nochebuena solo tienes que preocuparte por los acompañamientos. ( una gran solución para madres trabajadoras)
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